Un granito de sal por el Turismo en la bahía de Cádiz.
Son muchas las convocatorias a las que acudimos siempre que nos es posible, convencidos de que nuestra presencia en Ferias y otros foros es imprescindible para conseguir poner la provincia y bahía gaditanas en el punto de mira del turismo ornitológico, por el que trabajamos para intentar aportar nuestro granito de sal a través de los proyectos de custodia y gestión de territorios abandonados y de máxima riqueza medioambiental que nos ocupan, y preocupan, en la bahía de Cádiz.
En una de estas Ferias, en concreto en la Feria de Turismo de Jaén, pudimos conocer al técnico de Turismo, Antonio Martín, especializado en Turismo Vivencial en Cataluña y de nuestras conversaciones junto a técnicos de Turismo Andaluz nació una línea de colaboración que hace unos días daba sus primeros frutos, recibiendo a un grupo de responsables de Agencias de Viaje de Rumania que atendimos a petición de la Empresa Pública para la Gestión del Turismo de la Junta de Andalucía, y para los que realizamos una visita especial al Laboratorio de Investigación Gastronómica Chef del Mar, que se encuentra ubicado en el Parque natural Bahía de Cádiz, en un Molino de Mareas del siglo XIX restaurado recientemente.
Los touroperadores pudieron conocer de primera mano el molino de mareas, su funcionamiento original y el uso actual, disfrutando de numerosas esculturas que jalonan el soberbio edificio de piedra ostionera construido en 1815 y conocer las actividades que se llevan a cabo actualmente en el Laboratorio: restaurante gastronómico, laboratorio de I+D, sala de conferencias y zona de talleres infantiles y campaña escolar.
La segunda parte de la visita consistió en un recorrido por la Salina de San José, un espacio restaurado a iniciativa y proyecto técnico de SALARTE que recorrimos a pie para conocer el funcionamiento de una salina: compuertas, esteros, caños, cristalizadores y huerto salinero, que hoy suponen un refugio para la biodiversidad terrestre, acuática y aérea.
Pertrechados con telescopios, prismáticos, guías, mapas e infografía explicativa, el paseo por la Salina recién restaurada servía además para contemplar diversas especies que ya habitan en la zona como una preciosa espátula anillada, y algunos ejemplares de alcaravanes, archibebe común, archibebe claro, chorlito gris, correlimo zarapitín, alcaudones, zarapitos trinadores o chorlitejos patinegros.
Los tourperadores rumanos quedaron gratamente sorprendidos y satisfechos con la visita y nosotros felices de poder enseñar una de tantas maravillas que poseemos en esta bendita tierra. ¡Salud¡
